Este tema se puede encontrar en casi todas partes y en casi todas las denominaciones. Pero, ¿por qué incluso si este tema es tan común, todavía necesitamos discutir los sermones sobre la oración o la importancia de la oración en sí? ¿Por qué necesitamos comprender la importancia de la oración en nuestro caminar cristiano? ¿Por qué necesitamos tener sermones sobre la oración?

¡No temas! Porque la respuesta a estas preguntas se puede encontrar en este artículo. Entonces, repasemos y descubramos qué es la oración y cuáles son los diferentes sermones sobre la oración.

¿Qué es la oración?

La oración, en su definición más simple, es hablar con Dios. Es la forma principal para que todo creyente en nuestro Señor y Salvador Jesucristo se comunique con Él. La oración no es una reflexión pasiva o, como dice la gente, una meditación. En cambio, la oración es la manera de dirigirse directamente a Dios.

Es como un dispositivo móvil que utilizamos para comunicarnos con nuestros amigos, familiares y seres queridos. De la misma manera, utilizamos la oración para comunicar y expresar nuestras inquietudes, deseos, gratitud y otros asuntos a Dios. En otras palabras, la oración es una reacción natural de todo seguidor de Cristo. Justo como sucedió en Lucas 11:1 “Estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: “Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos”.

 

¿Por qué necesitamos orar?

Como se mencionó anteriormente, la oración es la manera que tiene todo creyente en Cristo de comunicarse con Dios. Oramos para agradecerle por todas las cosas que ha hecho en nuestras vidas. Oramos para expresar nuestras alabanzas, adoración y decirle cuánto lo amamos.

También podemos consultar con Dios a través de la oración: pedirle que Su sabiduría venga a nosotros y busquemos Su guía. Con todo esto, podemos concluir que la oración no es sólo una forma de comunicación con Dios, sino también una forma de tener comunión con Él.

Pero recordemos que no importa qué tipo de oración hagamos, debemos hacerla con fe tal como dice Santiago 1:6 que “6 Pero pida con fe, sin dudar, porque el que duda es como un ola del mar que es impulsada y sacudida por el viento”.

Diferentes tipos de oración

No es una sorpresa que casi todas las personas sepan orar. Pero lo que la mayoría de la gente no sabe es que existen diferentes tipos de oración. Conocer y comprender estos diferentes tipos hará que nuestras oraciones sean más específicas y intencionadas. Especialmente porque a través de la oración estamos ejercitando nuestra relación con Dios.

  1. Súplica

Este es el tipo de oración más común que hace la gente. Implica rogar o pedirle a Dios algo en forma de súplica. Este tipo de oración debe hacerse con fervor, arrodillándose o inclinándose y debe implicar una entrega total a Dios.

  1. Petición e Intercesión

Este tipo de oración se hace o ejercita cuando oramos por las necesidades de los demás y no por las nuestras. Intercedemos y oramos por el pueblo de Dios y no nos preocupamos por nuestras propias necesidades. Esto se debe a que la intercesión nos hace interiorizar la Palabra de Dios y nos permite ejercer Su poder al orar por Su pueblo.

  1. Thanksgiving

Este es el tipo de oración que usamos cuando expresamos gratitud por todas las cosas buenas que Dios ha hecho en nuestras vidas. Expresando gratitud por tener refugio, buena salud, comida, refugio, empleo, familia, amigos y todo lo que Dios ha hecho en usted.

  1. Alabanza y adora

Este tipo de oración reconoce a Dios que Él es en verdad Dios. Nos permite expresar que Él es soberano y Señor en nuestras vidas. Nos hace mostrar nuestro amor, admiración y respeto que le tenemos. Aunque la alabanza y la adoración se pueden realizar dondequiera que estemos, se practica mejor cuando estamos dentro de la iglesia con nuestros compañeros seguidores de Cristo.

  1. Guerra espiritual

Todos sabemos que aunque ya somos seguidores de Cristo, el enemigo no descansa en llevarnos de regreso a él. Es por eso que este tipo de oración se ejerce cuando lidiamos con batallas dentro de nosotros mismos y de los demás. Este tipo específico de oración implica pedirle a Dios y usar Su Palabra para protegernos a nosotros y a los demás de cualquier ataque del enemigo.

Tener una comprensión adecuada de los diferentes tipos de oración nos permitirá tener más propósito cada vez que nos comuniquemos con Dios a través de la oración. Pero, ¿cómo sabemos que Dios responderá nuestras oraciones? Es haciendo oración en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.

Según Juan 16:23 “23 En aquel día nada me pediréis. De cierto, de cierto os digo, todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, os lo dará”. Esto significa que cualquier tipo de oración que le pidamos a Dios, Él la responderá si se hace en el nombre de nuestro Señor Jesús.

Y según Daniel 9:18 “No te pedimos porque seamos justos, sino por tu gran misericordia”. Dios responde nuestras oraciones no porque seamos buenos, sino porque Él es misericordioso. Esto significa que no importa cuán buenos o justos pensemos que somos, no son nuestras características las que hacen que Dios responda nuestra oración. Más bien, es Su gran misericordia para con nosotros.

Sermones sobre oración por su ministerio

Ahora que entendemos qué es la oración, por qué necesitamos orar y cuáles son los diferentes tipos de oración, repasemos los diferentes sermones de oración que puede usar en su ministerio.

  1. La oración debe hacerse entre dos personas: tú y tu Dios.

Marcos 1:35

“Y por la mañana, levantándose mucho antes del alba, salió y se fue a un lugar desierto; y allí oró”.

En este determinado pasaje, podemos ver el ejemplo de Jesús de cómo se debe hacer la oración. Debe estar en un lugar solitario donde nadie pueda molestarte. Y sólo debería involucrarte a ti y a tu Dios.

  1. No abuses de la oración por peticiones inmorales.

Mateo 6:7-8

“Y cuando oréis, no uséis vanas repeticiones como lo hacen los paganos. Porque piensan que serán escuchados por sus muchas palabras. Por tanto, no seáis como ellos. Porque vuestro Padre sabe las cosas que necesitáis antes de que se las pidáis.

Santiago 4:3

“Pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastarlo en vuestros placeres”.

Estos pasajes nos dicen que las oraciones deben hacerse de manera moral y justa, no para abusar de la gracia y la misericordia de Dios.

  1. La oración debe darse a conocer.

Filipenses 4: 6

“Por nada estéis afanosos, sino que en todo, con oración y súplica, con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones a Dios”

Este mismo pasaje nos dice que en todo, nuestras oraciones deben ser dadas a conocer a Dios. Ore por sus necesidades de supervivencia, aflicciones de tristeza, satisfacción, preocupaciones por los demás y, lo más importante, nuestro agradecimiento a Dios.

  1. Las oraciones deben hacerse con fe.

Santiago 1: 6, 8

“Pero pida con fe, sin dudar, porque el que duda es como una ola del mar impulsada y sacudida por el viento. Porque no piense aquel hombre que recibirá algo del Señor; es un hombre de doble ánimo, inestable en todos sus caminos”.

Este pasaje nos dice que es muy importante tener fe cada vez que oramos. Porque nuestra fe nos hará confiar en que Dios contestará, escuchará y cumplirá nuestras oraciones.

  1. Las oraciones son guiadas por el Espíritu Santo.

Romanos 8: 26-27

“Asimismo, el Espíritu también ayuda en nuestras debilidades. Porque qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Ahora bien, el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos”.

Si no sabes qué orar no debes preocuparte porque este pasaje nos dice que el Espíritu Santo nos guiará en nuestras oraciones. Pero esto requiere oración ferviente y honesta a Dios. Entonces, si oramos apropiadamente, Dios sin duda nos dará Su Espíritu Santo para guiarnos en nuestras oraciones.

Conclusión

El momento en que recibimos y seguimos a Jesucristo; La oración es uno de los aspectos más importantes en la vida cristiana diaria. A medida que crezca su fe y avance en su caminar cristiano diario, continúe viviendo una vida de oración, una que esté en constante comunicación con Dios. Y si eres un ministerio, este artículo te ayudará a hacer crecer tu fe y tu ministerio.